San Juan 21:
14. Esta era ya la tercera vez que Jesús se manifestaba a sus discípulos, después de haber resucitado de los muertos.
15. Cuando hubieron comido, Jesús dijo a Simón Pedro: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas más que éstos? Le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. El le dijo: Apacienta mis corderos.
16. Volvió a decirle la segunda vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro le respondió: Sí, Señor; tú sabes que te amo. Le dijo: Pastorea mis ovejas.
17. Le dijo la tercera vez: Simón, hijo de Jonás, ¿me amas? Pedro se entristeció de que le dijese la tercera vez: ¿Me amas? y le respondió: Señor, tú lo sabes todo; tú sabes que te amo. Jesús le dijo: Apacienta mis ovejas.
18. De cierto, de cierto te digo: Cuando eras más joven, te ceñías, e ibas a donde querías; mas cuando ya seas viejo, extenderás tus manos, y te ceñirá otro, y te llevará a donde no quieras.
19. Esto dijo, dando a entender con qué muerte había de glorificar a Dios. Y dicho esto, añadió: Sígueme
Esta Breve nota la escribo porque me impactan estas palabras y su implicación.
Segun estos versos el Señor le dejó "bien marcado" en el corazón de PEDRO la relación que existe entre amar a Cristo y hacer su obra, Amar a Cristo y amar lo que el ama.
Cristo murio por su iglesia y los que somos sus hijos terminaremos haciendo lo mismo, dando nuestras vidas por las ovejas que El ha encomendado en nuestras manos.
El buen pastor su vida da por las ovejas...
No pude un creyente decir que ama a Dios y olvidarse de su obra, basta ya de excusas y de flojeras escondidas detrás de una falsa espiritualidad, es hora de poner manos a la obra y apacentar las ovejas.
Este es un llamamiento supremo expresado en distintas formas y "llamados" valga la redundancia.
Según el verso 18, el Señor le advierte a Pedro que llegaría un tiempo donde el no decidiría que hacer ni a donde ir y esta etapa de la vida de un creyente no todos la pueden comprender a plenitud, cuando Dios te introduce en esta verdad entonces se acaban las excusas, ya no haces lo que te parece, lo que opinas y lo que "sientes" sino que la voluntad de Dios se convierte en tu razón de vivir y de ser...
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